martes, 14 de abril de 2015

Amanecer distinto

Despertar en otra cama, en otro cuarto, no tener tus cosas, eso es raro. Pero más raro es no saber porqué sucedió así?.
Quizá las dudas son mías, el sentimiento es mio, pero lo comparto por este medio para que sea una carga menos todo este montón de palabras.
No extraño el lugar, extraño mi espacio, no extraño los objetos extraño los momentos, no extraño la alfombra extraño dormir con él, no extraño mi cama extraño el perfume de ella, extraño mi paz, mi soledad, no extraño todo extraño lo mio, mi costumbre, mi mundo, mi centro, mi pedazo de vida que ya no tengo.
El volcán de sentimientos que tengo dentro me hacen llorar a cada rato, me he vuelto una normal mujer sensible, he dejado de ser yo, para poder llorar con razón justificada.
Tengo el corazón en mil pedazo y él lo sabe, Me abraza y me dice que no me va a dejar caer, que 23 años sin él es como un nuevo comienzo para mi.
23 años con ella y ahora sin (ella), aún trato de asimilarlo, aunque literal me cague de miedo, tengo que hacerlo. Tal vez llore un tiempo más, quizá siga deprimida extrañando mi estilo de vida. Pero me toco.
Tan solo quisiera , ya no se que quiero, pero de verdad anhelo volver a tener el corazón fuerte. Para así poder salir de esta esfera de preguntas que nisiquiera me dejan descansar.